No podías amarme ,era imposible.
Con el tiempo terminé por comprenderlo.
Y fue tanto el dolor, que apacible
poco a poco lo fui ,sola, asumiendo.
Al comienzo rodaron múltiples lágrimas.
Con el tiempo ,se secaron sin dejar huella.
Y en otoño cuando menos lo esperaba
llego el viento, a tocar justo a mi puerta.
Al comienzo fue un dulce desvarío,
donde solo hubo sonrisas y no besos.
Con el tiempo su mirada me bastaba,
su sonrisa, y sus labios entre abiertos.
Porque, dime, si no hay algo tan soleado,
tan de alma, tan de dulce desatino,
como unas cuantas y amables palabras.
Que verso a verso, cambian el destino.
Y es ahí, en ese preciso instante,
donde quedaron selladas nuestras almas
una rosa y el viento citadino
que sonrien, cuando cruzan la mirada.
be bj
Con el tiempo terminé por comprenderlo.
Y fue tanto el dolor, que apacible
poco a poco lo fui ,sola, asumiendo.
Al comienzo rodaron múltiples lágrimas.
Con el tiempo ,se secaron sin dejar huella.
Y en otoño cuando menos lo esperaba
llego el viento, a tocar justo a mi puerta.
Al comienzo fue un dulce desvarío,
donde solo hubo sonrisas y no besos.
Con el tiempo su mirada me bastaba,
su sonrisa, y sus labios entre abiertos.
Porque, dime, si no hay algo tan soleado,
tan de alma, tan de dulce desatino,
como unas cuantas y amables palabras.
Que verso a verso, cambian el destino.
Y es ahí, en ese preciso instante,
donde quedaron selladas nuestras almas
una rosa y el viento citadino
que sonrien, cuando cruzan la mirada.
be bj