¿Será que el mar se halla hoy revuelto?
¿Será que el sol agita nuestro tiempo?
¿Será que hay horario que no estalla?
¿Será tal vez qué el cóndor y el cenzontle
se encuentran siempre unidos en la guerra
y pese a ello las flores y los montes
se interponen poniendoles fronteras?
¿Será que hoy existen los relojes
y se nos alzan cual torre amurallada?
¿será que hay oleajes que nos rompen
y es Eolo quien calla el rumor de las pisadas?
Más si te llamo en sistoles y diastoles
o si me buscas pesar de tus faenas
verás que pronto se borrán las fronteras
y se disparan sonrisas donde quiera.
Y llegará aquel abrazo enorme
casi gigante ,espléndido, soleado
que atravieza murallas, acantilados
y nos desasta los lazos coronados.
Ya ves, seremos simples oyamales
junto al rio de todas las ternuras
ese que sabe del amor sincero
ese que calla todas las locuras.
Porque no hay mar, ni sol, ni horario
ni flores, ni montes, ni Eolo que pueda separarnos
vamos unidos como espiga y trigo
a veces como sombras sin tocarnos.
be bJ
2002?
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